Rosquillas de yogur sin huevo

Estas rosquillas las recuerdo yo desde que tengo uso de razón. Mi madre no las hacia con forma de rosquillas pero la masa es la misma. Ahora se las hago yo a mi hijo para merendar o para desayunar y como el también es muy fan de toda comida casera a base de harina le encantan. Esta vez las hice con un ligero glaseado pero podéis usar tanto azúcar, azúcar glas, canela o lo que mas os guste. La textura es lo mejor porque son súper tiernas y absorben poquísimo aceite así que os las recomiendo al 100%. 

Ingredientes:

• Dos yogures griegos
• Una cucharilla de bicarbonato sódico
• 2cucharadas de aceite de oliva
• Una cucharilla rasa de sal
• Dos cucharadas de azúcar
• Harina de fuerza - la necesaria para hacer una masa blanda
• Aceite para freír

Para el glaseado ligero:

• Azúcar glas + la mitad de la cantidad de azúcar de agua y unas gotas de esencia de limón 

En primer lugar mezclamos el yogur con el bicarbonato. Cuando empiecen a salir las burbujas añadimos la sal, el azúcar y el aceite. Si queréis añadirle ralladura de limón o naranja, canela etc. ahora es el momento. Removemos muy bien y vamos añadiendo harina hasta conseguir una masa bien blandita. No es necesario amasar mucho y para saber si ya esta a punto podéis hacer un corte en la masa - si al cortar por dentro veis burbujas ya esta lista para reposar. Boleamos y dejamos tapada media hora. Ponemos aceite a calentar en una sartén y estiramos la masa bien fina enharinando la superficie para que no se nos pegue. Recortamos las rosquillas (yo por comodidad use un vaso haciendo luego un agujero en medio para darle la forma). Freímos por ambos lados y reservamos en un plato con papel absorbente para eliminar el exceso de aceite. Como ya os dije no son nada pesadas y apenas absorben aceite además suben bastante y quedan esponjosas por dentro. Hacemos el glaseado mezclando bien el azúcar glas con el agua ( yo añadí también unas gotas de esencia de limón) y bañamos las rosquillas previamente colocadas en una rejilla. Son rapidísimas de hacer pero salen tan buenas que se tarda menos en comerlas que en hacerlas. Salen unas cuantas así que si sois pocos en casa hacer solo la mitad de ingredientes.