La receta que os traigo hoy es al 100%
para mi marido. Es el único en casa que adora el cabello de Ángel. Yo aún estoy
de "Usted" con él y los niños ni fu ni fa. Pero bueno, como soy siempre
tan exagerada con las cantidades una parte de la masa rellene de chocolate
mmm. Un día de estos os pondré el bollito que salió. Veréis que las últimas
recetas que os pongo son de masas que incluyen yogur. Me ha gustado el
descubrimiento y toca probar cosas nuevas así que ahora es la moda del
yogur natural. Les he dado forma sencilla pero podéis rellenarlos de la manera
que más os guste.
Ingredientes:
- 250ml de agua tibia (podéis poner leche)
- una pastilla de levadura fresca
- 80gr de yogur natural
- 100gr de azúcar
- 50ml de aceite de girasol
- dos huevos a temperatura ambiente
- unas pizcas de sal
- harina de fuerza (a partir de 500g la que os haga falta para conseguir una masa bien blandita pero que no se pegue en las manos)
- 400gr de cabello de Ángel
Deshacemos la levadura en el agua y
añadimos unas cucharadas de harina. Removemos bien y dejamos en un sitio cálido
tapando el recipiente hasta que empiece a fermentar unos 15min. Una vez veamos
que están saliendo burbujitas podemos añadir el yogur (preferiblemente a
temperatura ambiente), los huevos, el aceite, azúcar, sal y por ultimo vamos
añadiendo la harina. Iremos amasando hasta conseguir una masa blandita pero que
no se quede pegada a las manos. Toca amasar un buen rato para dejarla lo más
lisa posible. Boleamos y dejamos en un bol tapada hasta que doble su
volumen.
Partimos en dos la masa ya fermentada, amasamos ligeramente para quitar el aire cada mitad y dejamos reposar unos minutos. Espolvoreamos un poco de harina y
estiramos una de las bolas dándole forma rectangular. Cubrimos generosamente de
cabello de Ángel y enrollamos. Cortamos círculos de aproximadamente un dedo de
grosor y colocamos sobre papel de hornear en una bandeja de horno. Volvemos a
tapar con un paño y dejamos levar otra horita aproximadamente (dependiendo de
la temperatura ambiente puede ser más o menos). La otra mitad como ya os dije
rellene de chocolate. Horneamos a 180º en el horno previamente caliente hasta
que estén dorados. El resultado son unos bollos de miga muy tierna y
agradable.
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